CADENA DE FAVORES.
Un niño imagina un curioso sistema para mejorar el mundo;
hacer favores incluso antes de que te los devuelvan. Es decir: no devolver
favores, sino pagarlos por adelantado, y no necesariamente a quien te lo hizo a
ti. Para sorpresa de todos, la desinteresada propuesta causa furor entre la
gente.
Uno de los aportes de la película al servicio comunitario es
la forma en que piensa Trevor, cuando elabora su proyecto, donde expone que las
personas han de actuar localmente, pero pensando globalmente, es decir, mejorar
el mundo es cosa de todos, pero sabemos que podremos actuar con mayor eficacia
en lo más próximo, donde veremos resultados, y esos resultados repercutirán en
niveles superiores. Si mejoran las comunidades, mejoran los estados y por consiguiente
mejora el país, y así sucesivamente.
A través del servicio comunitario podemos prestar asistencia
a aquellas comunidades más próximas, y lo realizaremos desde nuestras
posibilidades, es decir, desde nuestro perfil académico.
Hablo de esta película en relación al proyecto de TOSC en
Talavera de la Reina, ya que lo que Trevor lleva a cabo, no es, ni más ni
menos, que eso, un proyecto a pequeña escala.
"Creo que a algunos les da miedo pensar que las cosas puedan ser distintas. El mundo no es exactamente una mierda. Alguna gente está acostumbrada a las cosas como están y aunque estén mal, no pueden cambiar. Y digamos que se rinden... Y cuando alguien se rinde, todos pierden."
"¿Nos suspenderá si no cambiamos el mundo?"